SALSA EN EL PARQUE DEL BARRIO GUADUALES

SALSA EN EL PARQUE DEL BARRIO GUADUALES ESTE SABADO 23 DE JUNIO.
UN SENTIDO HOMENAJE A TITO GOMES Y HECTOR LAVOE.........OTRO QUE VA PARA LA ORQUESTA DE PAPA DIOS
ESPERANDO LA GENTE POSITIVA LLEGUE A LA CONVOCATORIA QUE LA ASOCIACION DEL BARRIO GUADUALES ESTA HACIENDO, A LOS QUE SIEMPRE HAN ESTADO AL PIE DEL CANON EN ESTE BLOG, ALLA NOS VEREMOS. MONTUNO ASESINO....!!

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Tito Gómez


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Cantante

Nombre verdadero: Luis Alberto Gómez

Fecha de nacimiento: 9 de abril de 1948

Lugar: Juana Díaz, Puerto Rico

Falleció el 11 de junio de 2007 en Cali, Colombia



El ritmo candente de la salsa, tropical, pegajoso y único se difunde en voces que le cantan y rinden homenaje desde siempre. Una de estas voces es la de Tito Gómez, puertorriqueño que tras varias décadas de saborear este ritmo se desarrolló en esta profesión y la hizo el eje central de su vida.

Radicado desde 1984 en Colombia, el intérprete juanadino definió su rumbo en la música a temprana edad. Su voz se destacó en importantes agrupaciones como La Sonora Ponceña, el Conjunto de Ray Barreto, La Terrífica y el grupo de Charlie Palmieri, , orquesta de Tito Valentin y Rubby Haddock entre otras. Trascendiendo fronteras, encaminó su dirección al llegar a Venezuela, donde perteneció a la orquesta La Amistad.Tambien canto en la orquesta de tito valentin y rubby haddock Y posteriormente llegó al lugar que se convirtió en su hogar, Colombia, donde se integró al Grupo Niche destacándose como solista. Junto a esta agrupación, el intérprete boricua selló la internacionalización de su talento.



Entre algunos de los temas que se convertieron en éxitos en su voz se encuentran “Guararé”, con Ray Barreto; “Paño de lágrimas” y “Prende el fogón” con la Sonora Ponceña y otros con el Grupo Niche.


En 1992 Tito Gómez se integró al catálogo de talentos de la empresa Musical Productions. Con ellos presentó su primera producción discográfica titulada “Un nuevo horizonte”, difundiéndose los temas “Déjala” y “Déjame volver”. Siguiendo esta línea de éxitos, lanzó su segunda propuesta “Agradecimiento”, producción en la que sobresalió por los temas “Ganas” y “Página de amor”. Su tercera grabación, “Recogiendo frutos”, le apuntó el éxito con el dúo junto a Tito Rojas “Déjala II”. Con el esmero y colaboración del productor Julio (Gunda) Merced, Tito Gómez presentó su cuarta producción “Volver”, en la que incluyó temas como “Nuestro secreto” de Félix Pasache, “Deseos y delirios” de Lula Barbosa, Ana L. Rubans y Graciela Caraballo y “Rosas y espinas” y “Te quiero así”, de Nino Salcedo. Luego de cosechar éxitos tanto en Colombia como en Nueva York, regresó al estudio de grabación iniciando su ofensiva con la promoción del tema “Quién nos iba a decir”, grabado a dúo con Tito Rojas. Completó dicha producción los números “Voy sin saber”, “Cuando te fuiste”, “A qué juegas tú”, “Llora”, “Es cierto”, “Como me quiere esa mujer” y “Todo huele a ti”.

El salsero puertorriqueño falleció en la noche del lunes 11 de junio de 2007 víctima de un infarto cardiaco. Dos días antes Gómez había realizado su última presentación en la ciudad de Pereira, capital del departamento de Risaralda en Colombia. Al partir, el intérprete puertorriqueño contaba con tan sólo 59 años.


LA DESPEDIDA DE TITO GOMEZ, SEPULTADO EN PUERTO RICO


Al ritmo de “Prende el fogón” y “Paño de lágrimas”, cientos de personas dicen adiós al salsero.



Juana Díaz – Fue un bolero de angustia, bailado y entonado por los deudos de Tito Gómez bajo un sol implacable.

Los primeros acordes los escribió el fundador de la Sonora Ponceña, don Quique Lucca, cuyo semblante, a los 94 años, se transformó cuando lloró a Tito, con una mueca que ni la misma muerte podría imitar.

Caminando con dificultad, se despidió de Junior Gómez y demás familiares, abordando el vehículo oficial de la Sonora Ponceña, rumbo a su casa.

El féretro con los restos del famoso salsero, fallecido en Colombia el martes pasado, fue sellado ayer por razones de salubridad.

De todos modos sus sobrinos y nietos lo abrazaron contra su pecho y dejaron descansar sus cabezas sobre la estrella de la bandera nacional, como si lo quisieran convencer de su inmenso amor en su paso al más allá.

Lo amaron tanto que a las 2:37 p.m. salieron de la Urbanización Santo Domingo caminando detrás del cortejo fúnebre y transportando sobre una plataforma rodante el ataúd.

Caminaron lentamente, sin prisa, como la marcha de un bolero. Primero el tránsito se detuvo en la Carretera 149, en dirección a Villalba, y luego en la Carretera 14 que conduce a Ponce.

Amigos como su productor Julio “Gunda” Merced y Nicolás Vivas, de Chaney, entre otros salseros, acompañaron al pueblo en la procesión, típica de los vía crucis cuaresmales, hacia el camposanto municipal.

Sus nietos, primos, ahijados, hermanos, tíos, amigos y vecinos lo escoltaron por las inmediaciones del Río Jacaguas donde se bañó esnú y pescó cuando era niño.

Desde las montañas verdes de Villalba, soplaba una suave y fresca brisa que tornó más llevadera la caminata.

Por una potente bocina se escuchaban sus éxitos “Prende el fogón” y “Paño de lágrimas” y, paso a paso, debajo de los paraguas, los gemidos de sus deudos.

Bajo la sombra de una ceiba centenaria, escoltada por árboles de mangó, flamboyán y tamarindo, el alcalde Ramón Hernández Torres despidió el duelo, anunciando de inmediato la asignación de $100 mil para un busto en honor de Tito Gómez.

Nuevamente criticó la indiferencia del Instituto de Cultura Puertorriqueña. Mientras hablaba un parroquiano proclamó a viva voz que Tito se llevó a la tumba la obra inédita del autor juanadino Leonardo Santiago.

También se llevó el sentimiento de los jíbaros sureños que sembraron y cortaron caña y el lelolai de los trovadores de su entorno.

Su sobrino José Javier y su amigo Miguel Torres Berniel también se unieron a la despedida del duelo.

Otros familiares, como su hijo Humberto Gómez Pomales, graduado de ingeniería química del Recinto Universitario de Mayaguez, no pudieron exteriorizar sus sentimientos.

Pero la música dijo más que mil palabras. En un bolero Tito cantó que llorar es de hombre y ayer sus amigos lo hicieron a moco tendido, sin complejo ni inhibiciones, cuando el trío de Justo Rivera entonó el bolero “Paño de lágrimas”, con el coro del pueblo, y durante la sentida interpretación del trompetista Mandy Santiago de la melodía “Hacia la tumba”.

Su hija mayor Carmen Ivette Gómez se desmayó al descender el féretro hacia la profundidad, frialdad y oscuridad de la fosa donde también reposan los restos de su madre, Isabel Rivera.

Como leímos en una de las pancartas, Tito Gómez será el “ídolo por siempre” de su familia; del pueblo juanadino; del Puerto Rico salsero; de la Cali rumbera y también de la “Jeva de la java”, de “El hablador” y del canallón de “Estás caliente”, entre otros de sus personajes.

Sin embargo, en Juana Díaz el coquí cantó triste anoche y al amanecer es posible que calle el ruiseñor, porque la voz de Tito Gómez, con su dulce y agradable tesitura, los emuló con clave, sentimiento y sabor.

Nota: Publicación de elnuevodia.com